1947
Guión y dirección: George Seaton.
Actores: Edmund Gwenn, Maureen O’Hara, John Payne, Natalie Wood.
¿Por qué? No sé si esta película es un clásico pero es seguro que es la clásica película de navidades. Solo con el cartel ya adivinamos que el auténtico Papá Noel/Santa Klaus baja a la Tierra y arregla algunos entuertos antes de desaparecer misteriosamente. Es tan clásica que es inconcebible que no la haya visto durante mi infancia. En mi infancia todo este cine pasaba por el único canal de televisión, todos lo veíamos. Y, sin embargo, no recuerdo esta película en concreto, o no la distingo de las demás.
¿De qué? El auténtico Papá Noel/Santa Klaus baja a la Tierra y arregla algunos entuertos antes de desaparecer misteriosamente. En esta ocasión recala cerca de los grandes almacenes Macy’s donde una ejecutiva muy ocupada le contrata para hacer su propio papel -me refiero a Santa Klaus- durante la campaña de navidad. Doris Walker (interpretada por Maureen O’hara, nada menos) es una mujer moderna, trabajadora, racionalista. La persona menos dada a creer en una fantasía como la existencia de Santa Klaus.
¿Merece la pena? Por películas como ésta es por lo que el cine clásico es lo que es. Sentimental y optimista, está realizada por profesionales y funciona a la perfección. El Santa Klaus interpretado por Edmund Gwenn, como un superhéroe de la Mavel, se enfrenta una y otra vez a situaciones imposibles de las que no podrá salir y lo consigue sin caer en el ridículo. Con el equilibrio exacto entre lo verosímil y lo ambiguo. Por el camino, el George Seaton guionista hace una crítica amable de la psicología pseudocientífica y de la mercantilización de las fiestas. Una película sentimental que no produce vergüenza.
Críticas en Rottentomatoes.
